Pared con pared es el título de la película que Aitana protagoniza y que puedes ver online en Netflix con tu suscripción a la plataforma de vídeo bajo demanda. El filme hace honor a su título y nos narra una historia de dos vecinos, bastante diferentes, que conviven en dos apartamentos conjuntos. La cinta, dirigida por Patricia Font, casi con toda seguridad ocupará los primeros puestos de lo más visto durante el primer fin de semana de su estreno.
Pared con pared es una propuesta, dentro del catálogo de Netflix, que busca equilibrar la comedia romántica con un toque de frescura aportado por la cantante Aitana en su rol protagónico. Dirigida por la experimentada Patricia Font, la película se presenta como un remake de la francesa “Tras la pared”, y aunque navega por aguas conocidas, intenta imprimir un sello distintivo. El montaje, además, resulta esencial para que la conexión entre el personaje de Fernando Guallar y Aitana logre transmitir todo lo que, tabique por medio, se necesita contagiar a los espectadores.
Lo mejor de Pared con pared
La dirección de arte y fotografía son, sin duda, los pilares que sostienen la estética visual de la cinta. Ana Alvargonzález, en su doble rol como directora artística y diseñadora de producción, crea una atmósfera que, si bien es familiar a la de otros filmes parecidos, no deja de ser acogedora y visualmente atractiva. La experiencia de Font en la dirección se hace evidente en la fluidez con la que se desarrollan las escenas, manteniendo un ritmo constante que evita cualquier atisbo de tedio.
El elenco de secundarios, encabezado por figuras como Miguel Ángel Muñoz, Natalia Rodríguez o Paco Tous, aporta una solidez que complementa la historia principal, aunque uno podría argumentar que sus talentos no se explotan al máximo. Aitana, como Valentina, lleva la batuta de la narrativa, y su presencia ante la cámara es un imán que atrae no solo a los personajes dentro de la película, sino también a miles seguidores fuera de ella.
Una película para un público objetivo muy concreto
Sin embargo, no todo es armonía en Pared con pared. El guion de Marta Sánchez, aunque ágil, no logra profundizar en el arco narrativo de los personajes secundarios, en parte, por ese empeño de no alejar el foco del trabajo de Aitana. La previsibilidad de la trama, al ser un remake, podría desencantar a aquellos que buscan giros inesperados o una renovación del género.
La música, a cargo de Arnau Bataller, cumple su función pero se echa en falta más el trasfondo musical de Aitana. La cinta deja con la sensación de que su voz musical podría haber sido el hilo conductor de una experiencia más envolvente.
Pared con pared es una película que sabe a qué público se dirige y lo hace de forma efectiva. No obstante, para aquellos que busquen más que un entretenimiento ligero, puede que la película se quede corta. Es un producto diseñado para el disfrute sin complicaciones, pero que en su seguridad, olvida arriesgar y explorar las profundidades de sus personajes y el talento musical que tiene a su disposición.