Santi Amodeo es uno de los directores andaluces que más personalidad desprende en su cine. Afrontar la temática del suicidio adolescente en “Las gentiles” no era una tarea fácil. Sin embargo, el sevillano es uno de esos realizadores a los que no le da miedo el riesgo. Sacar adelante una producción cuyo proceso de escritura se inició hace casi una década da muestras de que hay la industria audiovisual en España va muchas veces de insistir y no desistir.
Durante el 18 Festival de Sevilla tuvimos ocasión de hablar un rato con el cineasta para que nos contase su experiencia a la hora de ponerse al mando de esta película rodada en 16 mm. Precisamente nuestra charla comenzó hablando sobre el trabajo conjunto con el director de fotografía Álex Catalán para obtener una identidad visual tan bella.
“No hay tanta gente que utilice el cine con la pericia que lo hace Álex. Él ha estado conmigo en casi todas mis películas y hemos rodado en cine la mayoría. Que esté él en el proyecto de “Las gentiles” es lógicamente una garantía. A mí me gusta rodar en analógico más que en digital”
La casualidad de Santi Amodeo
Encontrar a las protagonistas de “Las gentiles” era otro de los puntos decisivos a la hora de dotar de realidad y naturalidad al filme. Sin embargo, Santi Amodeo supo quién daría vida a Ana en un bar. Las casualidades de la vida a veces son el mejor casting para dar con talento desconocido.
“Yo no soy nada cabalístico. Esa situación fue muy curiosa y particular. Yo no iba a ir a ese bar porque me tenía que haber ido a mi casa dos horas antes y no me fui. Llegué allí y sentí una iluminación. Podría haber quedado en una anécdota si a la hora de hacer el casting hubiese encontrado a otra chica que lo hubiese hecho mejor. Sin embargo África de la Cruz fue la que mejor lo hizo. Llegó a la prueba porque le dije que se presentara, pero no sabía si era buena actriz o no. No solo creo que lo hizo muy bien en la película, sino que se puso el peso a la espalda y tiró hacia adelante con buena actitud siempre, con altibajos lógicos, pero está en casi todos los planos del filme. Cumple muy bien en todo momento”.
La importancia de dar luz al suicidio
Para Santi Amodeo siempre resultó imprescindible tratar con delicadeza un tema tan sensible. Sin embargo, el director apostó fuertemente por no dejar en la oscuridad algo que merece ser mostrado para abrir los ojos. De hecho, hasta la resultó más curioso poder encontrar esa valentía en términos de producción que de dirección.
“Ahora mismo pienso que sí se le está dando la importancia que realmente tiene. El suicidio adolescente es algo serio. Yo he sido muy cuidadoso porque me impone mucho el tema. Me he entrevistado con gente que lo intentó y he saco cosas de personas que lo consiguieron. Para mí la pelicula no es lo mismo que para los demás. He sacado diálogos de las protagonistas procedentes de una chica que se ha suicidado y ha dicho eso. Veo la cinta con un pellizco que la gente no lo ve. Que hables de algo difícil no quiere decir que no te tengas que tirar a la piscina. Hay que intentar ser sensible con un tema tan delicado. Le veo más mérito, por ejemplo, a que Canal Sur entrase en la producción a que un director se arriesgue”.
Precisamente el hecho de contar con Canal Sur detrás ha sido un soplo de aire fresco para que Santi Amodeo gozase de libertad creativa. Algo muy importante para un director que se considera “disfrutón” cuando rueda cada película.
“Cuando subes un peldaño más, que a mí me ha pasado, no te imponen nada pero intentan guiar tu camino. Tener más libertad en términos de producción me da más satisfacción creativa y además el riesgo que significa estrenar una película en este caso me hace sentir que estoy haciendo lo correcto. Si me equivoco lo hago yo y hace que me merezca más la pena. A veces haces cosas sin tanta convicción porque la industria te lleva hasta ahí y cuando tienes que defender el proyecto lo haces un poco más impostado. Esta película la defiendo más sinceramente”.
En “Las gentiles” nos encontramos con un desarrollo de la trama que nos lleva hasta sitios a los que realmente no sabemos si llegaremos. Algo que Santi Amodeo no buscó pero que al final va en el camino de lo que se cuenta.
“No me había fijado aunque es verdad que la película tiene algo de que las cosas van a tiempo real. No es algo pretendido pero me parece que va en la lógica narrativa de la película”.